Sigue estos consejos para aprovechar tu tarjeta de crédito, al usarla con responsabilidad se convertirá en una aliada.
- Recuerda que no es dinero adicional. La tarjeta es un medio de pago para compras que se pagan en el mismo mes y un medio de crédito para compras diferidas. Independiente de la forma de pago que elijas, debes pagar todos los consumos que realices.
- Pregunta los costos. Antes de tener una tarjeta, averigua qué servicios tiene, cómo funcionan y cuánto cuestan, como por ejemplo los seguros o los programas de recompensas. También consulta la tasa de interés, de mora y los gastos por cobranza.
- Asegúrate de que puedas pagar. Antes de gastar, calcula tu capacidad de pago. Recuerda que no puedes gastar más de lo que ganas. Utiliza esta fórmula de ejemplo:
+ Ingresos mensuales (sueldos, rentas, negocio, etc.) $500
- Gastos fijos (vivienda, servicios básicos, alimentación, transporte, etc.) $250
- Cuotas de préstamos $50
- Ahorro para emergencias (10% de los ingresos) $50
= Capacidad de pago $150
- Paga según la duración del bien. Si necesitas utilizar crédito para pagar en cuotas diferidas, fíjate en la duración de lo que compras antes de definir el plazo. Por ejemplo:
- La comida se consume de inmediato, por lo que es preferible pagar corriente.
- La ropa dura un tiempo intermedio, por lo que se aconseja diferir a corto plazo.
- Los electrodomésticos o los muebles duran largo tiempo, por lo que se recomienda diferir a mediano plazo.
- Evita el pago mínimo. Es aconsejable pagar el total del estado de cuenta cada mes, conformado por los consumos corrientes y las cuotas de los diferidos correspondientes a ese mes. El pago mínimo genera intereses adicionales.
- Marca la fecha de pago. Pagar a tiempo te evitará intereses por mora y gastos de cobranza. Procura pagar unos días antes de la fecha máxima señalada en tu estado de cuenta en caso se presenten contratiempos.
- La tarjeta es personal. Evita prestar tu tarjeta a familiares o amigos. Es posible que ellos no te paguen y tú deberás pagar la tarjeta para no caer en mora. Tú eres el responsable de tu tarjeta y del pago de los consumos.
- No botes los recibos. Conserva los recibos de las compras que realizas con tarjeta para que puedas comparar con el estado de cuenta y verificar que no hayan consumos que no has realizado.
- Cuida tu tarjeta de crédito. Guárdala en un sitio seguro y sácala cuando tienes planificada una compra con tarjeta. Avisa a la institución financiera si la tarjeta es robada o la pierdes. Memoriza la clave de la tarjeta, no la anotes.
Recuerda que la administración correcta y pago puntual de tu tarjeta de crédito te permite mantener un adecuado historial crediticio lo cual es muy útil a la hora de solicitar un préstamo. Esperamos que éstos consejos te sean útiles!